Uptown y Downtown, las direcciones de Nueva York

Todo lo que hayas leído o escuchado sobre NY, es cierto. Impresiona desde el primer minuto. Nada más llegar te embriaga una extraña sensación porque parece que llegas a un lugar extraño pero que ya conoces. ¿Será por el cine?

Llegamos q la Gran Manzana para pasar el Fin de Año, una de las fechas más señaladas del año en el lugar más especial del mundo. Todo de cine. Pero pronto topamos con la realidad.

Como verdaderos guiris, no tardaron en llegar los percances, pero con la ayuda de Sarah y Daniel, nuestros caseros, salimos airosos de todos ellos.

Ellos fueron quienes nos quitaron la venda de los ojos, respecto a Times Square y la famosa caída de la bola. Personas de todo el mundo quieren pasar allí el fin de año, pero lo que no cuentan es lo poco glamuroso que en realidad es. Sarah y Daniel nos preguntaron lo que las guías no cuentan. ¿Habéis traído culeros? María y yo nos miramos pensando ¿qué son culeros? Y al poco caímos en el que para aguantar tantas horas de espera hasta medianoche, sería imprescindible llevar pañales para poder hacértelo encima. Sí amigo, no hay baño para todos y si consigues salir para buscar uno, ya te será imposible volver a encontrar a tu familia.

Pero de todos modos, nuestro fin de año quedará grabado en nuestros corazones. No pintaba bien la noche, el pronóstico de lluvia ahogaba todos nuestros planes hasta que Sarah y Daniel nos invitaron a pasar la noche con sus amigos. Espero que ellos tampoco lo olviden porque les inculcamos nuestra tradición de las uvas de la suerte.

Te sientes poderoso cuando por fin te mueves con soltura por el metro de NY. Uptown y Downtown son los conceptos básicos para moverte bajo tierra. Aunque también fue gracias a Sarah que nos ayudó a recuperar el dinero que la máquina de tickets. Llamar al teléfono de asistencia fue un suplicio y nada fácil e intuitivo. Así que si os pasa, pedir ayuda.

El metro es un sitio seguro, lleno de caras pintorescas y a veces extrañas… que le da una personalidad increíble a la ciudad. Los artistas callejeros se agolpan por los andenes y no es difícil ver homeless viviendo entre los pasillos o en los mismos vagones.

Otro medio de transporte estrella es Uber, pero realmente si te sabes mover en metro, carece de sentido este servicio. Es caro y lento por la cantidad de tráfico y peajes que hay en la cuidad.

Entre nuestras recomendaciones personales os animamos a probar los puestos de comida callejeros, no tienen desperdicio. Por 10$ tienes un perfecto plato combinado con toque hindú; a nosotros nos gustó uno de los que había entre la 5th Avenue y Central Park, justo enfrente del Plaza.

Otro punto a tener en cuenta es si hacer Tour Turístico o no. Nosotros por los pocos días que estuvimos y nuestro plan de viaje fotográfico, preferimos ir a nuestro aire. El famoso Tour de Los Contrastes, consiste en recorrer los 4 barrios principales sin bajar de una furgoneta, y para nosotros eso no es viajar.

Las cosas importantes que sí hay que reservar son las atracciones que se contratan mediante el CityPass. Nosotros fuimos a ver el musical de Broadway, El Fantasma de la Ópera, y compramos de última hora las entradas en las taquillas TKTS con un suculento descuento. Están todas las obras. También compramos por anticipado la subida obligada al Top of the Rockefeller, donde si queréis evitar aglomeraciones, lo ideal es ir a primera hora de la mañana, pero sí lo que interesa es disfrutar del atardecer y las luces, entonces subir a la hora del sunset, eso sí, preparados para encontrar un hueco donde poder colocaros.

Nueva York es una ciudad súper fotogénica y cualquier oportunidad es un momento dulce para fotografiar. Nosotros seguimos en nuestra línea y caminábamos en busca de nuevos encuadres.

Aparte de las fotos de paisaje urbano que ya has podido ir viendo en este post, también nos dio tiempo de retratar sus gentes. Hemos preparado una sesión en nuestra web de (robados) y otra de postboda a nuestros amigos Sarah y Daniel.

Hay tantos sitios que visitar en el mundo y tan poco tiempo para hacerlo, que considerar repetir un destino a veces se convierte en un dilema. Para nosotros NY ha sido un viaje inolvidable y nos han quedado muchos sitios por ver. Repetiremos seguro.